Los auriculares de conducción ósea son un tipo de dispositivo de audio que funciona transmitiendo ondas sonoras a través de los huesos del cráneo, en lugar de a través del aire como los auriculares tradicionales. Los auriculares utilizan transductores que se asientan en los huesos cercanos a las orejas y vibran, lo que a su vez crea ondas sonoras que viajan a través de los huesos y estimulan directamente el oído interno, permitiendo al usuario escuchar el audio sin obstruir sus canales auditivos.
La tecnología de conducción ósea se desarrolló originalmente para audífonos, pero en los últimos años se ha adaptado para su uso en auriculares. Los auriculares de conducción ósea son especialmente populares entre los deportistas y los aficionados a las actividades al aire libre que necesitan permanecer atentos a su entorno mientras escuchan música o reciben llamadas. Como los conductos auditivos quedan abiertos, los usuarios pueden seguir oyendo los sonidos ambientales, como el tráfico o las conversaciones, lo que los hace más seguros para su uso al aire libre.
Los auriculares de conducción ósea también ofrecen algunas ventajas a las personas con deficiencias auditivas o problemas de oído, ya que no dependen del tímpano ni del conducto auditivo externo para transmitir las ondas sonoras, sino que las evitan por completo.